miércoles, 14 de octubre de 2009

Prebióticos y probióticos: definición y usos en la Práctica Clínica


Varios estudios realizados a lo largo de los años, han señalado que la flora intestinal supone a una gran cantidad de microorganismos comensales que han evolucionado en armonía con su huésped mejorando la salud del mismo. Estas bacterias intervienen en el desarrollo normal del sistema inmune y regulan la respuesta de los patógenos. (Revista Española de Enfermedades Digestivas, 2007). El tubo digestivo de los recién nacidos está completamente libre de microorganismos, la flora bacteriana se comienza a adquirir inmediatamente después del nacimiento.

La función principal de la flora del colon es la fermentación de los sustratos no digeribles de la dieta y del moco producido por el epitelio intestinal. Como resultado de esta actividad se recupera energía metabólica, sustratos absorbibles y se produce la proliferación de la población de microorganismos. Otra característica importante de la flora colónica es la formación de AGCC como producto de la fermentación de carbohidratos que llegan al colon, y la formación de ácido láctico; la flora intestinal es capaz de interactuar con los sustratos y generar efectos beneficiosos al hospedero. (Revista Cubana Alimentación y Nutrición, 2002).



Definiciones:

Alimentos funcionales
El término alimento funcional se define como aquel producto, alimento modificado o ingrediente alimentario que puede brindar beneficios a la salud superiores a los que ofrece el alimento en condiciones normales o naturales. El efecto puede generarse para el mantenimiento del estado de salud o en la prevención de enfermedades, generando un impacto positivo en la salud del o los individuos.
Un alimento puede ser funcional para una población en general o para grupos específicos que por diferentes características fisiológicas van a aumentar el riesgo a ser candidatos a distintas enfermedades.

Prebióticos
El término prebiótico se refiere a los ingredientes de los alimentos no digeribles que producen efectos beneficiosos sobre el huésped estimulando selectivamente el crecimiento y/o actividad de un tipo o de un número limitado de bacterias en el colon. (Olveira, G; Gonzáles, I. 2007). Son fundamentalmente fructo y galacto oligosacáridos, incluida en este concepto está la fibra dietética.
Los dos prebióticos más estudiados son los fructo-oligosacáridos o FOS conocidos como oligofructosa e inulina. Son carbohidratos presentes en vegetales como ajo, cebolla, puerro, espárrago, alcachofas, legumbres, lechuga, alcelga, cereales integrales,miel, tomates, plátanos y frutas. Si se analizan los hábitos de alimentación de la población general, se estima que la cantidad que se consume de FOS es de unos 800 miligramos al día, cuando los expertos recomiendan ingerir entre 2 y 6 gramos.
De manera más reciente, se ha definido al prebiótico como el citoesqueleto de los vegetales, es decir, una sustancia que aparenta ser inerte que puede ser fermentada por algunas bacterias pero no puede ser desdoblada por enzimas digestivas, por lo que resulta ser inabsorbible.


Para que una sustancia sea considerada prebiótico, debe cumplir con algunas características, tales como:
× Ser de origen vegetal.
× Formar parte de un conjunto de moléculas complejas (de manera que no puedan ser hidrolizadas).
× No ser digeridas por las enzimas digestivas.
× Ser parcialmente fermentadas por las bacterias colónicas.
× Ser osmóticamente activas.

Probióticos
Se denomina probiótico a aquel factor de origen microbiológico que estimula el crecimiento de otros organismos. Actualmente la OMS propone una definición más simple de probiótico y se refiere a microorganismos vivos que cuando son administrados en cantidad adecuada confieren un efecto beneficioso sobre la salud del huésped estimulando las funciones protectoras del sistema digestivo. (Olveira, G; Gonzáles, I. 2007).


Para que los microorganismos puedan llevar a cabo esta protección deben cumplir con los postulados de Huchetson, que son los siguientes:
× Ser habitante normal del intestino.
× Tener un tiempo corto de reproducción.
× Ser capaz de producir compuestos antimicrobianos.
× Ser estable durante el proceso de producción, comercialización y distribución para que pueda llegar vivo al intestino.
× Deben ser capaces de atravesar la barrera gástrica para poder multiplicarse y colonizar el intestino.


El efecto protector se realiza mediante 2 mecanismos: El antagonismo, que impide la multiplicación de los patógenos; y la producción de toxinas que imposibilitan la acción patógena. Los probióticos disminuyen el pH intestinal produciendo ácido láctico y ácido acético. Estos compuestos tienen un efecto antiséptico del sistema digestivo, minimizando el desarrollo de organismos dañinos que de otra forma compiten por nutrientes y alojamiento en las paredes intestinales.
Entre los alimentos fuentes de probióticos, distinguimos los siguientes: la leche fermentada, los yogures, lácteos en general; estos alimentos contienen lactobacilos, bifidobacterias o Streptococcus Termophillus que son las cepas probióticas más comunes.

Relación simbiótica
Al hablar de simbióticos se hace mención a aquellos productos que contienen probióticos y prebióticos. En sentido estricto debería ser reservado a productos en los que el componente prebiótico selectivamente favorece al componente probiótico. Esta se encarga de beneficiar al huésped mediante el aumento de la sobrevivencia e implantación de los microorganismos vivos de los suplementos dietéticos en el sistema gastrointestinal.
La microflora intestinal es la encargada de producir AGCC y ácido láctico a partir de bifidobacterias y lactobacilos, esto se da como consecuencia de la fermentación de carbohidratos no digeribles. Estos productos trabajan disminuyendo el ph en el colon creando un ambiente en el cual las bacterias patógenas no pueden crecer ni desarrollarse. En resuman, los prebióticos son el “alimento” principal de las bacterias probióticas.
(Revista Cubana Alimentación y Nutrición, 2002).


Mecanismo de acción
Los prebióticos afectan las bacterias intestinales aumentando el número de bacterias beneficiosas y disminuyendo la población de microorganismos potencialmente patógenos. Los probióticos afectan el ecosistema intestinal estimulando los mecanismos inmunitarios de la mucosa y estimulando los mecanismos no inmunitarios a través de un antagonismo/competencia con los patógenos potenciales. Se piensa que estos fenómenos median la mayoría de los efectos beneficiosos, incluyendo la reducción de la incidencia y gravedad de la diarrea, que es uno de los usos más ampliamente reconocidos para los probióticos. (Organización Mundial de Gastroenterología, 2008.)



Justificación del uso de los probióticos en la Enfermedad Inflamatoria Intestinal

Los avances en la patogenia de la inflamación intestinal tanto aguda como crónica indican que los probióticos, los prebióticos y/o los simbióticos resultarán útiles en el tratamiento de estos trastornos. Un ensayo aleatorizado y controlado con placebo, realizado en Japón sobre 20 pacientes con colitis ulcerosa utilizando 100 ml/día de suplemento de leche fermentada con bifidobacterias o de placebo durante 12 semanas, mostró que el índice de actividad clínica, endoscópica e histológica era significativamente menor en el grupo que recibió leche fermentada por bifidobacterias que en el grupo del placebo después del tratamiento. (REV ESP ENFERM DIG 2007)


Justificación del uso de probiótico en el tratamiento de la Pancreatitis Aguda

En pacientes con pancreatitis aguda se han realizado estudios con moderado número de sujetos (45 - 62) en los que se valoraba el uso de simbióticos vs prebióticos únicamente en infusión por sonda nasoyeyunal. En el primer trabajo la incidencia de necrosis infectadas o abcesos fue claramente menor con los simbióticos (4,5% vs 30%); en el segundo, se observó una menor incidencia, no estadísticamente significativa, de fracaso multiorgánico, sepsis y mor talidad; no obstante sí descendió significativamente la incidencia de fracaso multiorgánico y de síndrome de respuesta inflamatoria sistémica valorados conjuntamente.


Riesgos del uso de probióticos en la práctica clínica

Los lactobacillos y las bifidobacterias abundan tanto en la dieta de los humanos como en el intestino sano. Las infecciones por estos microorganismos podrían ocurrir de forma natural incluso sin estar relacionadas con la ingesta de estos microorganismos.
Todos los casos de infecciones sistémicas por probióticos se han producido en pacientes con enfermedades graves de base (Diabetes mellitus, valvulopatías, prematuros, problemas hematológicos, SIDA, pacientes de cuidados intensivos, con nutrición parenteral, con yeyunostomías, síndrome de intestino corto, trasplantados, pacientes con cáncer, etc.). La mayoría de estos casos se resolvieron con tratamiento antibiótico pero, en algunos derivaron a shock séptico e incluso provocaron la muerte. Es posible que diferentes cepas de probióticos tengan diferentes perfiles de seguridad. No obstante, en estudios prospectivos realizados en adultos inmunodeprimidos y niños infectados por VIH y en neonatos pretérmino no se ha comunicado ningún caso de sepsis por Lactobacilos. A nivel general la balanza de beneficios frente a los riesgos está claramente inclinada hacia los primeros ya que el riesgo de infección por el consumo de probióticos sería muy bajo, incluso en pacientes inmunodeprimidos. No obstante, existen grupos seleccionados de pacientes en los cuales todavía se recomienda emplear con precaución, como en prematuros y en determinados pacientes inmunodeprimidos.


Conclusiones
La composición de la flora intestinal puede ser modificada por la ingesta de alimentos suplementados con prebióticos, probióticos o ambos (simbióticos). Sin embargo, está confirmado que la práctica de una dieta balanceada asegura el aporte adecuado y necesario de prebióticos y probióticos en el organismo; por lo cual se debe de tratar de recurrir al consumo de alimentos fortificados con pre-probióticos solamente en aquellos casos donde la práctica clínica lo justifique como parte del tratamiento médico para mejorar el estado de salud de la persona.


Bibliografía consultada:
× Isolauri, E; Sutas, Y; Salminen, S. Probiotics: effects on immunity. The American Journal of Clinical Nutrition. American Society for Clinical Nutrition 2001.
× Cummings, J; Macfarlane, G; Englyst, H. Prebiotic digestion and fermentation. The American Journal of Clinical Nutrition. American Society for Clinical Nutrition 2001.
× Roberfroid, M. Prebiotics and probiotics: are they functional foods ? . The American Journal of Clinical Nutrition. American Society for Clinical Nutrition 2000.
× Guarner, F; Khan, A; Guarisch, J; otros. Guías Prácticas: Probióticos y prebióticos. Organización Mundial de Gastroenterología, mayo 2008.
× Olveira, G; González, I. Probióticos y prebióticos en la práctica clínica. Unidad de Nutrición Clínica y Dietética, Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital Regional Universitario Carlos Haya. Málaga, España. 2007
× Peña, A. Flora intestinal, probióticos, prebióticos, simbióticos y alimentos novedosos. Revista Española de Enfermedades Digestivas, Madrid. Volumen 99, Nº 11; págs. 653-658, 2007.
× Cagigas Reig, A; Blanco, J. Prebióticos y probióticos, una acción beneficiosa. Instituto de Nutrición e Higiene de loa Alimentos. Revista Cubana de Alimentación y Nutrición. 2002.

martes, 13 de octubre de 2009

Nutrición en el periodo de ablactación




La alimentación luego de los 6 meses de vida

Algunas personas no saben o sienten miedo acerca la alimentación que debe serle brindada al niño (a) luego de los 6 meses de vida.
Si bien es cierto, en los últimos años se han brindado campañas para apoyar la Lactancia Materna durante los 2 primeros años de vida, donde nos dicen que los primeros 6 meses la alimentación del niño (a) debe ser únicamente leche materna.

Pero sabemos ¿cuáles alimentos darle, cuáles no y de qué manera luego de los 6 meses de vida ?
Esta es una breve guía del conocido “periodo de ablactación”, el cual es el periodo después de los 6 meses de vida, donde se le introducen poco a poco los alimentos al niño (a) con el fin de que vaya desarrollando y reconociendo diferentes sabores, aromas y texturas.

¿Por qué es importante la alimentación en este periodo ?

Varios estudios demuestran que la primera experiencia gustativa del niño (a) es desde el vientre materno. Por eso se le recomienda a la mujer embarazada que durante ese periodo se exponga a la mayor cantidad de sabores y alimentos.
Otros estudios han demostrado que es en esta etapa donde los diferentes alimentos a los que el niño(a) se ve expuesto van a determinar los hábitos alimentarios que la persona va mantener en la edad adulta, y que además una menor exposición a diferentes tipos de sabores y texturas está más relacionado al desarrollo de obesidad.

¿ Cómo iniciar la alimentación con alimentos sólidos ?

Después de los 6 meses de edad el niño (a) está preparado para alimentarse con alimentos, además del seguimiento de la leche materna.
Los alimentos deben ser incorporados poco a poco y de uno en uno. Esto quiere decir que cada alimento que le sea dado debe brindársele por un periodo de 3 días seguidos antes de pasar al próximo alimento.

Los alimentos deben de darse solos, y no en compañía de otros alimentos. Esto debido a que en algunos casos se presentan reacciones alérgicas al alimento, si mezclamos dos alimentos y con algunos aditivos como colorantes o condimentos, no sabríamos qué causó la reacción. Además el objetivo de este periodo es de acercar al niño (a ) a experiencias sensoriales propias, donde aprenda a distinguir y reconocer sabores propios de un alimento y a adquirir gustos y preferencias individuales.

¿Qué alimentos no deben darse antes del primer año de vida?

Alimentos como el huevo, chocolate, frijoles, comidas grasosas, mermeladas, cebolla, ajos, jugos de caja, frutas cítricas como fresa, naranja, mandarina, remolacha, brócoli, embutidos, pescados y mariscos, gaseosas o productos con colorantes. Estos alimentos deben ser evitados ya que se relaciona con alergias en niños (as) de esta edad.
Algunos alimentos que se consideran de alto riesgo porque pueden causar ahogamiento, son las nueces, el maní, las cerezas, las uvas, los caramelos, entre otros.

Recuerde que el primer año de vida es el que nos va determinar el estado de salud y los hábitos alimentarios que va mantener el niño (a) en los siguientes años de vida, incluyendo la adultez. Por lo tanto es muy importante que tenga cuidado en los alimentos que van a ser introducidos y en la manera en los que se va realizar.
Préstele atención y permítales ser parte del proceso de alimentación, el derramar los alimentos e introducir las manos en la comida, le permiten tener un contacto más directo con los alimentos y hasta logrará que mantenga mayores preferencias por los alimentos.
La hora de la comida es una de las más importantes en el día, bríndele un ambiente cálido y agradable que le ayude a disfrutar de ese momento.

Recomendaciones:

1. Bríndele los alimentos en consistencia de puré, esto hará que se familiarice con las diferentes texturas, además estimula su dentadura.

2. Antes de pasar a otro alimento, asegúrese de haberle brindado el anterior por un periodo de 3 días. Esto hará que el niño (a) haya reconocido el sabor, olor y textura de ese alimento.

3. No mezcle dos alimentos. En este periodo tratamos de que el niño (a) se familiarice con los alimentos uno por uno; de esta manera le ayudamos a determinar qué sabores van a ser de su preferencia o qué alimentos le causan reacciones alérgicas.

4. Cuando le brinde los alimentos, no los prepare con ningún tipo de condimentos. Lo que intentamos es asegurarnos que el niño (a) podrá experimentar los diferentes sabores y aromas del propio alimento. Además, en caso de que un alimento le ocasione alergia, no sabríamos si lo que lo provocó fue el alimento o la adición del condimento.

5. No se preocupe si su hijo (a) rechaza un alimento. Lo importante es que tenga contacto con el alimento, a pesar de que no lo coma. Esto se debe a que los gustos y preferencias se activ an y se desarrollan al tener el alimento en contacto con la lengua, por lo que no es necesario que lo consuma. Asegúrese de que siga manteniendo contacto con los alimentos que rechaza y así, poco apoco, él mismo se irá acostumbrando a las texturas e irá aceptando el alimento.

lunes, 12 de octubre de 2009

Relación migraña-alimentación

Concepto:
La migraña es un dolor de cabeza o cefalea,se dice que es el síntoma neurológico más frecuente; la crisis de migraña consiste en un dolor de cabeza intenso, iniciado en un lado del cráneo y generalizado posteriormente a toda la cabeza. Inicialmente se da a manera de latidos, acompañándose de síntomas como náuseas, vómitos, sensación de abatimiento y malestar general. Aparece frecuentemente la intolerancia al ruido y a la luz y una palidez facial en quien sufre la migraña.

Relación Migraña-Alimentación:

Para entender la relación de la dieta con la génesis de la migraña hay que comprender los mecanismos fisiológicos que la pueden originar. Uno de ellos es la asociación entre migraña y alergia alimentaria. La cefalea, es una de las consecuencias de la reacción inmunológica del organismo frente al contacto con sustancias de los alimentos que identifica como tóxicos.
Otra explicación fisiológica se relaciona con el efecto vasodilatador e inflamatorio de las arterias cerebrales, efecto que se traduce en el dolor intenso que experimentan algunas personas propensas tras consumir ciertos alimentos.

En la mayoría de los casos la dolencia no desaparece cuando se deja de tomar los alimentos más problemáticos, porque hay otros muchos factores que la desencadenan. Entre otros, el estrés, la menstruación, el ayuno, el ejercicio físico, la falta de sueño o algunos medicamentos como los anticonceptivos.


Sustancias que provocan la migraña:

1. Aminas biógenas: Algunos alimentos, como el chocolate, el vino, la cerveza o las conservas de pescado, cuentan con una alta concentración de aminas biógenas como la histamina, la tiramina, la feniletilamina o la serotonina. Su exceso en el organismo puede causar cefaleas.

2. Compuestos fenólicos: Presentes en productos como el chocolate, el té o el café, algunos compuestos fenólicos, como los flavonoides, anulan la acción de las enzimas que procesan las aminas biógenas, con lo que se produce un aumento de su nivel en el organismo y, por consiguiente, el riesgo de sufrir migraña.

3. Aditivos Alimentarios: El glutamato y el aspartato, componentes químicos del glutamato monosódico y el aspartato, son aminoácidos que actúan en el organismo como mediadores de la inflamación, lo que explicaría el inicio de la migraña asociada al consumo de productos que llevan estos aditivos.


Alimentos que pueden producir el dolor:

Conservas y semi conservas depescado, embutidos, quesos maduros, hígado, bebidas alcohólicas, cerveza, chocolate, té, café, comida china, caldos y sopas deshidratadas, productos de pastelería y gaseosas dietéticas .


Alimentos que pueden aliviar el dolor:

Alimentos ricos en vitamina C, como la guayaba, kiwi, cítricos, tomate; esto debido a que la vitamina C actúa como analgésico y puede inhibir la síntesis de prostaglandinas responsables del dolor. Alimentos fuente de vitamina B2, como la leche y derivados, carnes y cereales integrales. Estudios demuestran que alivian la intensidad y duración de la migraña. Y, finalmente, los ácidos grasos insaturados, como los frutos secos, pescados, aceites de semillas, ya que reducen la agregación plaquetaria e inflamatoria , mecanismos que inician la migraña.

Dieta hipopurínica


Esta dieta está dirigida a personas que mantienen niveles elevados de ácido úrico y que por lo tanto padecen de hiperuricemia, también conocido como gota, que es la acumulación de ácido úrico en las articulaciones, riñones y tejidos blandos.


Para esta dieta, es importante mantener un consumo adecuado de agua para asegurarse la eliminación de ácido úrico a través de la orina; sin embargo se debe tener presente que si se están presentando problemas de retención de líquido, tanto el agua como los alimentos que contienen grandes cantidades de agua, los refrescos, sopas, sal y condimentos empacados deben consumirse con moderación.


Alimentos permitidos:

× Leche descremada.
× Queso descremado.
× Huevo.
× Pollo o pescado sin piel.
× Vegetales.
× Frutas.
× Papa, plátano, yuca, camote, arroz, pan y galletas integrales.
× Margarina.
× Aceite vegetal.Caldos de vegetales o de carne sin grasa.


Alimentos restringidos:

Estos alimentos deben consumirse máximo dos veces por semana en días no seguidos.
× Té y café.
× Carne de res (carne roja).
× Frijoles y garbanzos.
× Espárragos, espinacas, tomate, leguminosas, aguacate y frutos secos.


Alimentos prohibidos:

Alimentos que no deben ser consumidos en ningún momento.Azúcar y productos de pastelería, jamón y embutidos en general, mondongo, vísceras, caldos o sopas grasosas, gaseosas, chocolates, cremas, quesos grasos, paté y manteca.

Recomendaciones nutricionales en Artritis


La naturaleza nos ofrece ciertos alimentos que ayudan a contrarrestar los problemas articulares, aminorando las molestias y dolores. Se recomienda llevar una vida activa y con estilos de vida saludable; además de una pérdida de peso que nos conduzca a un peso cercano al ideal para contrarrestar las molestias de la enfermedad.


Los alimentos que protegen las articulaciones son:

Pescados: pescados ricos en ácidos grasos omega 3 como el salmón, sardina o la trucha; varios estudios han demostrado que estos ácidos ayudan a reducir la inflamación de los tejidos articulares.
Aceites vegetales con alto contenido de omega 3:
aceite de linaza, canola, soja, germen de trigo y de avellana.
Verduras y legumbres: Los vegetales de hojas verdes y de color rojo, amarillo, o naranja son apropiados ya que contienen grandes cantidades de vitamina C, esta ayuda a neutralizar los radicales libres causantes del daño articular, se los debe consumir crudos o poco cocidos para que no pierdan sus nutrientes.

Frutas: Las manzanas, bananas, melones, sandías, fresas y cerezas.
Frutos secos y semillas: Estos son ricos en varias vitaminas, selenio y calcio, las semillas de lino contienen grandes cantidades de omega 3.

Cereales integrales: Aportan minerales, en especial selenio y muchas vitaminas además por su contenido de fibras evitan el estreñimiento y ayudan a eliminar impurezas.
Leche de soja y derivados: Es una gran alternativa a la leche de vaca, su
consumo resulta ideal para aquellas personas que padecen artritis reumatoidea ya que por lo general no lograr tolerar la leche de vaca.

Además se debe tener un adecuado contenido de Calcio, ya que el hueso se va ver desprotegido y esto aumenta el riesgo de padecer osteoporosis, por lo que una dieta rica en este mineral va ayudar a prevenir males secundarios. Este lo puede encontrar en alimentos lácteo, además de vegetales de hojas verde como las espinacas y el brócoli.
Otra de las recomendaciones a seguir es el bajo consumo de Sodio y de alimentos fuente de purinas, y disminuir notablemente el consumo de alcohol, ya que estos son factores predisponentes a ataques de gota.

Lactancia materna



Para que la lactancia se realice de manera exitosa, la madre debe prestar atención a su alimentación. Cuando no se consumen cantidades adecuadas de nutrientes la salud de la madre puede verse afectada debido a que el organismo utilizará los nutrientes para la producción de la leche materna.
Además de la alimentación balanceada, se deben consumir de 12 a 16 vasos de agua por día que ayudarán a producir suficiente cantidad de lecha materna.




Ventajas de la lactancia




Para la madre:
1. Fortalece el vínculo afectivo madre-hijo (a).
2. Reduce la pérdida de sangre y el útero regresa a La normalidad en menor tiempo.
3. Alivia la sensación de llenura de los senos.
4. Reduce el riesgo de padecer cáncer de seno y ovarios.
5. Previene la obesidad. Recuperación más rápida de la figura.
6. Disminuye fracturas de cadera.
7. Recibe satisfacción y gana seguridad en sí misma.
8. Mayor comodidad de trasporte y de preparación, porque viene lista !
9. Reducción de costos, pues es gratis.




Para el niño (a):
1. Brinda protección contra alergias, infecciones, trastornos intestinales,
linfomas y leucemias, y diabetes en la adultez.
2. Proporciona seguridad emocional por la relación afectiva que genera.
3. Adecuado desarrollo físico, mental y nutricional porque brinda las cantidades adecuadas de todos los nutrientes.




Para la familia:
1. Más económica.
2. Ahorra tiempo, porque no hay que prepararla.
3. Está ala temperatura adecuada.


Almacenamiento:



La leche materna debe guardarse en un recipiente debidamente desinfectado.
× Puede estar 8 horas a temperatura ambiente.
× Puede mantenerse en refrigeración hasta por 72 horas.
× Y en congelación, se puede mantener hasta por 3 meses.


La alimentación del niño(a) debe mantenerse únicamente de leche materna durante los primeros 6 meses de vida, donde luego se irán introduciendo los distintos alimentos poco a poco manteniendo el consumo de la leche materna.
Recuerde que debe evitarse el uso del chupón ya que puede producir infecciones y problemas en las encías.

Alimentación en el periodo de embarazo


¿Comer por dos o para dos ?. Durante el periodo de embarazo existen diferentes creencias sobre la alimentación que debe seguir la madre en torno a este periodo.
Igualmente que en la alimentación normal, la alimentación durante el embarazo debe incluir diferentes alimentos de los diferentes grupos y en preparaciones saludables. Entendamos por preparaciones saludables, aquellas bajas en grasas y azúcares, y en donde se la brinda al organismo una variedad de alimentos en las cantidades necesarias.



El mito de comer para dos lleva a las mujeres en este periodo a tener aumentos increíbles en el peso corporal. Para entender la alimentación que se debe mantener se deben tener en cuenta los dos riesgos más comunes que pueden surgir:
× En primer lugar, el organismo va actuar protegiendo al nuevo ser, por lo tanto el feto va “absorber” todos los nutrientes que la madre ingiere. Por lo que una mala alimentación puede llevar a la madre a descompensaciones y enfermedades durante esta etapa, y complicaciones durante el parto.
× Por otra parte, si el organismo no protege a este nuevo ser, el feto no va estar obteniendo los nutrientes necesarios para su desarrollo provocando bajo peso al nacer, mal formaciones, anemia, entre otros.
Por lo tanto, durante este periodo, la madre debe cubrir sus requerimientos nutricionales diarios más las necesidades del nuevo ser; de esta manera se cubren las necesidades nutricionales de ambas partes, evitando posibles complicaciones.



Durante el embarazo la madre aumenta alrededor de 1 kg de peso corporal por mes, para un total de 9 kg (máximo 12 kg). Por lo tanto, con una alimentación adecuada, el peso aumentado durante este tiempo va ser perdido en el momento del nacimiento del bebé quedando la paciente con una ganancia máxima de 3 kg, los cuales son perdidos después del parto con una alimentación saludable y con la ayuda de la lactancia del niño(a).


Ejercicio:
La realización de ejercicio debe ser parte de la vida diaria, a menos que un especialista indique lo contrario por alguna situación especial o que la madre siente malestares. Sin embargo, se debe tener claro que el ejercicio que se debe realizar debe ser a paso suave no deben realizarse ejercicios pesados; por ejemplo camine de 30 a 45 minutos a paso moderado por lo menos 3 veces por semana.



Recomendaciones generales:
1. Mantenga los tiempos de comida establecidos y no pase hambres. Esto le ayudará a mantener niveles adecuados de azúcar que le ayudarán a mantener sus actividades normales.
2. En caso de que sienta nauseas, realice más de 6 tiempos de comida; es decir, realice comidas de poco volumen y no consuma líquidos con las comidas sino fuera de ellas.
3. No se acueste inmediatamente después de comer, espere al menos 30 minutos después de cada comida para evitar regurgitación o reflujos.
4. Realice ejercicio al menos 3 veces por semana durante 30minutos. Le ayudará a mantenerse activa y a mantener su peso corporal. Además evita el estreñimiento.
5. Tenga cuidado con los azúcares y las harinas refinadas. Alimentos como los dulces, los chocolates, las galletas, el pan blanco, los vegetales harinosos entre otros, son alimentos de alto índice glicémico; lo que quiere decir que tienen la capacidad de aumentar el azúcar en sangre a niveles mayores que otros alimentos. Esto puede traer consecuencias como la diabetes gestacional, la cual trae secuelas tanto para la madre como para embrión, desde bebés macrosómicos y complicaciones durante el parto, entre otros.
6. Vigile la cantidad de grasa en sus alimentos. Recuerde que no solamente debe disminuir aquellas preparaciones fritas, sino también aquellos alimentos que contienen altas cantidades de grasas como la margarina, la natilla, queso crema, los chocolates, la grasa visible de las carnes, los embutidos, entre otros. Estos le elevarán los niveles de las grasas malas en sangre.
7. Prefiera las frutas con cáscara y los vegetales crudos. De esta manera obtiene la mayor cantidad de vitaminas, minerales y fibra. Esta última le evitará el estreñimiento.
8. Consuma de 6 a 8 vasos de agua por día. La buena hidratación además de favorecer el aspecto de la piel, nos ayuda a mejorar la digestión. Recuerde que si tiene nauseas y vómitos debe consumirla fuera de las comidas y no con ellas y en sorbos pequeños.
9. Mantenga el consumo adecuado de calcio. Para eso, consuma alimentos tales como la leche, yogurt, queso y los vegetales de hojas verdes. Esto le ayudará a la formación de huesos del embrión, además le evitará complicaciones óseas durante este periodo o después.
10. Recuerde que en este periodo lo importante no es bajar de peso, pues eso compromete su salud y la del niño(a), lo importante es que mantenga una alimentación balanceada y la realización de ejercicio para mantener un peso adecuado y prevenir un aumento de peso superior a lo recomendado, con lo cual evita otras complicaciones.

Diez pasos hacia el éxito


Son muchas las personas que requieren ayuda para la pérdida de peso y mantenimiento del mismo. Para que esto se logre, es necesario estar consientes del cambio que vamos a emprender y reconocer que, además de ser un estilo de vida, es una práctica que requiere disciplina y para lograrlo debemos estar informados sobre la manera en que podemos alcanzar nuestro objetivo, para esto lo recomendables es estar bajo supervisión de un profesional en el área que nos asesore y nos guíe sobre el proceso.


Estas son diez recomendaciones muy breves y sencillas que podemos poner en práctica, y que a su vez, puede ser el inicio del cambio.


1. Realice entre 5-6 tiempos de comida al día. Estos tiempos deben estar integrados al menos por desayuno, merienda a media mañana, almuerzo, merienda a media tarde, cena y una merienda nocturna. Recuerde que es importante no dejar pasa más de 3 horas entre una comida y otra.

2. Mastique despacio. La señal de saciedad llega al cerebro 20 minutos después de iniciar la ingesta. Si comemos muy rápido o realizamos otras actividades mientras comemos (como ver televisión, leer, escuchar música, otros.) el cerebro va estar “ocupado” en estas otras actividades sin prestarle mayor atención a la alimentación, por lo que vamos a tender a comer más percibiendo la señal de saciedad más tarde.

3. Consuma de 6 a 8 vasos de agua. La hidratación es parte de la buena alimentación. El consumo de agua nos permite una adecuada hidratación, además de ayudarnos a eliminar toxinas. Un vaso de agua antes de cada comida nos brinda mayor sensación de llenura.

4. No haga las compras cuando tiene hambre. Cuando tenemos hambre todo nos parece muy rico y terminamos llenando el carrito de cosas altas en azúcares y grasas y pobres en vitaminas, minerales y fibra.

5. Engañe su vista: ¡ Reduzca el tamaño de su plato ! Entre más grande es el plato, mayor va ser la sensación de que estamos comiendo poco y vamos a seguirlo llenando, provocando que comamos más.

6. Realice ejercicio. La realización de ejercicio nos ayuda a disminuir de peso y a evitar el estreñimiento; además nos ayuda a reducir los niveles de colesterol malo y aumentar los niveles de colesterol bueno. Por otra parte, liberamos endorfinas que nos brindan sensación de bienestar y disminución de la ansiedad.

7. Prefiera las frutas y vegetales crudos y con cáscara. De esta forma obtenemos una mayor cantidad de vitaminas, minerales y fibra. Prefiera los alimentos ricos en fibra. La fibra nos ayuda a prevenir el estreñimiento, y además, nos brinda mayor sensación de llenura que los alimentos que no lo contienen. Por ejemplo comernos una naranja en lugar del jugo de naranja, el pan integral en vez del pan blanco, y los vegetales y frutas con cáscara que es donde hay mayor aporte de fibra.

8. A la hora de la comida, coma primero las preparaciones frías como las ensaladas y los vegetales, ya que estos nos brindan mayor sensación de saciedad, generando que tengamos un menor consumo de los demás alimentos, tales como los cereales y las grasas.

9. Planifique sus comidas. Piense con anticipación que va a preparar en los diferentes tiempos de comida, esto le va ayudar a facilitar el proceso de cocción y va evitar que realice preparaciones altas en grasas y cereales.

10. Dedíquele tiempo a cada comida. Haga de la hora de la comida un rato agradable, disfrútelo y no realice otra actividad mientras come, ya que eso provoca que el cerebro no le preste atención a lo que está consumiendo lo que nos puede hacer comer en exceso.